buscar
videos
Entrevista a W. Goobar en el Noticiero de Telefé
Trailer documental sobre Estela Carlotto
Mujeres, según Galeano
Rmtrevista en Canal Metro
Emtrevista en Canal Metro
ESTELA: Documental de S. Di Florio y W. Goonar

John Kerry sustituye a Clinton

El sucesor de Hillary tuvo una posición antiinjerencista y de distención con Cuba. Enfrentó a Bush en la elección de 2004 y es un experto en relaciones internacionales.

Walter Goobar
El senador demócrata por Massachusetts John Kerry fue nombrado oficialmente como nuevo secretario de Estado por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama. El anuncio del recambio para remplazar a Hillary Clinton fue demorado por la tragedia de Connecticut que se cobró la vida de una veintena de niños de jardín de infantes.
La designación de Kerry ha sido la primera nominación de Obama para configurar el nuevo gabinete que lo acompañará en su segundo mandato, que comienza el próximo 20 de enero.
Kerry, presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado y candidato a la presidencia de Estados Unidos en 2004, era el favorito a suceder a Hillary Clinton como máximo responsable de la política exterior del país después de que la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Susan Rice, se retirara de la carrera la semana pasada debido a algunas inversiones dudosas e incompatibles con el cargo.
Veterano del cuerpo diplomático internacional del Partido Demócrata, Kerry consigue un cargo que lleva persiguiendo desde hace años. El senador, de 69 años, se convirtió en uno de los principales apoyos de Obama durante su primera campaña electoral a la presidencia. Actualmente, Kerry está al frente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, Cámara en la que entró hace 27 años.
Obama ha declarado que confía en que el Senado confirme “rápidamente” la designación de Kerry, que tiene por delante “grandes desafíos” pese a que, según el mandatario, Estados Unidos es hoy “más seguro, más fuerte y más respetado” en el mundo que hace cuatro años.
Aunque quizás desconocido en América latina, Kerry es una figura veterana y muy reconocida de la política estadounidense. Por más de 27 años ha ocupado una de las dos curules del estado de Massachussets por los demócratas, el mismo partido de Obama. Desde 2009, cuando su bancada ganó las mayorías, preside la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de los Estados Unidos. Esa posición lo convierte de hecho en el congresista norteamericano más influyente en los temas de política exterior.
Pero el momento decisivo de la vida política del próximo jefe de la diplomacia estadounidense se dio en 2004 cuando se enfrentó a George W. Bush por la presidencia de su país. Como nominado demócrata en esas elecciones, Kerry protagonizó una campaña centrada en la oposición a la guerra de Irak que Bush había lanzado. Aunque como veterano del Vietnam y activista antibélico en los años setenta, el senador liberal tenía autoridad moral en sus críticas a la invasión de Irak, grupos cercanos a la campaña republicana desdibujaron su desempeño militar y minaron su credibilidad.
Tras esa derrota John Kerry regresó al Senado y fue uno de los primeros pesos pesados en sumarse a la precandidatura de Barack Obama en enero de 2008. Aunque su nombre sonó como canciller de Obama en su primer período, el puesto fue ofrecido por Obama a Hillary Clinton. Cuatro años después, la primera opción tampoco fue Kerry. Obama había pensado en la embajadora en Naciones Unidas, Susan Rice, pero su manejo de la crisis en Libia generó rechazo dentro de los senadores.
Sin embargo, no se descarta que Kerry deba vencer resistencias de propios y ajenos en las audiencias del Senado, en particular por su postura de distensión hacia Cuba. Kerry, un firme opositor de la intervención de Estados Unidos en América latina desde su elección en 1984, ha mantenido siempre una postura inteligente sobre Cuba. Él apoyó los derechos de viaje no sólo para los cubano-americanos, sino para todos los estadounidenses. No le dio a la administración Obama un cheque en blanco para ejecutar los programas de cambio de régimen de la Usaid en Cuba y levantó la financiación cuando pudo. Fue un escéptico fiable de los millones gastados en la difusión de propaganda contra Cuba –Radio y TV Martí– y de los asesores y burócratas que crean la programación que muchos cubanos ni ven, ni oyen o no les importa.
Lo más probable es que será cuestionado por el senador Bob Menéndez, presidente de un Comité de Relaciones Exteriores del Senado que ha cambiado mucho. Menéndez, un Demócrata, pero un disidente de la liberalización, prometió oponerse a “cualquier proyecto de ley que de alguna manera atenúe o disminuya la prohibición de viajar a Cuba”. Él unió fuerzas con el senador Marco Rubio (R-FL), en un esfuerzo fallido por detener las reformas de viajes people to people de Obama en 2011 y amenazó el presupuesto de la OEA después de que ésta abrió la puerta a Cuba en una reunión de sus miembros.
Fuera de las filas de los republicanos estará el senador Richard Lugar, un estadista inclinado hacia delante, cuyo informe, “Cambio de política hacia Cuba - En el interés nacional de Estados Unidos”, todavía está lleno de ideas de política útiles que fueron ofrecidas al equipo de Obama, y muchas nunca adoptadas, cuando se publicó en 2009. En cambio, Kerry estaría mirando los rostros ceñudos de senadores como John McCain y Marco Rubio, quien podría tratar de utilizar la audiencia para crear un registro en contra de la reforma.
Con Kerry bajo el comando de la política exterior, Obama le apuesta a una figura reconocida internamente y con un amplio conocimiento de las relaciones internacionales de Estados Unidos. Su postura es contraria a los enfrentamientos militares y tendría bajo su batuta el punto final de la guerra en Afganistán y el manejo de Siria e Israel en el Medio Oriente.
Hillary Clinton no asistió al acto porque se recupera en su casa de un desmayo y una caída la semana pasada que le ocasionaron una contusión en la cabeza. Obama comentó que habló con ella por teléfono, que se está recuperando y que está “animada”.
Pese a su popularidad, Clinton anunció hace meses que no seguiría junto a Obama en un segundo mandato porque quiere descansar y pasar más tiempo con su familia.
Cada secretario de Estado de Estados Unidos parece cumplir con la difícil misión de superar a su antecesor. La lista es larga. Cornelia Clinton ha sido una mala bestia, pero su antecesora fue nada más y nada menos que Condoleezza Rice. Y antes fue Colin Powell y sus mentiras genocidas en la ONU. Y antes Madelaine Albright y así podríamos seguir hasta llegar a uno de los mayores asesinos de la historia de la humanidad: Kissinger. En fin, por primera vez en mucho tiempo parece posible esperar otra cosa de Kerry.

Diario Miradas al Sur
22-12-2012

libros
El tercer atentado
El caso de los dos atentados perpetrados en la Argentina, combina muchos de los temas más candentes de nuestra historia reciente: terrorismo internacional y terrorismo de Estado, espionaje, asesinatos políticos...
Osama Bin Laden El banquero del terror
Los mitos y las historias verdaderas sobre Osama Bin Laden se arremolinan en la imaginación de millones de seres humanos como el humo de las Torres Gemelas...
Copyright 2011 -- Todos los derechos reservados